Por Angel Hugo Merlo*

Es gente matándose por un pedazo de tierra” –cínico comentario del vocero presidencial, Manuel Adorni, en relación al reciente hecho -domingo 14 de enero –  en el cual cinco personas murieron en un  enfrentamiento por toma de tierras

La oferta de suelo urbanizado se restringe exclusivamente a los sectores medios y medios/altos. La producción de suelo accesible para los sectores sociales de bajos e incluso medios ingresos, es mínima, y muchas familias se ven forzados a acceder a un lote básico para asentar una vivienda a través del mercado informal, de acuerdo a sus posibilidades, estrategias y expectativas exponiéndose a la acción de especuladores que lucran con las necesidades de  los  desposeídos;  los miserables que integran este cartelprovienen de distintos sectores encadenados (políticos, empresarios, policía, profesionales, y lúmpenes que traicionan a sus compañeros adoptando los desvalores del capitalismo) : en ningún caso el factor común es la identidad nacional, solo los identifica el lucro y la subversión de valores que es la consecuencia inevitable del deterioro social al que conduce la desigualdad estructural en la que nos hemos ido sumergiendo.

Los procesos de urbanización se estructuran en base a situaciones irregulares -muchas veces con la anuencia de los propietarios, como en las urbanizaciones indivisas-, no planificados, que expanden la urbanización hasta en suelos inapropiados sin infraestructuras y alejados de los servicios – lo cual demanda tarde o temprano costosas inversiones públicas para su regularización.

La nueva situación forzada por la políticas pretendidas por el DNU impulsado por la nueva administración nacional,(derogación de la ley de alquileres y aumento descontrolado de los precios de los alquileres en un contexto de inflación/estanflación) esta empujando a los sectores medios/bajos a las periferias de nuestras ciudades, engrosando aún mas estos conflictos y desigualdades (crecimiento de familias que viven en la calle, o comparten viviendas y deptos con la familia paterna), impulsando, descontroladamente,  el hacinamiento.

Una política planificada de lotes con servicios destinada a los sectores postergados de nuestra sociedad, no solo iniciaría a dar cumplimiento un derecho – vergonzosamente postergado por los gobiernos de base popular, es algo sencillo de pensar y relativamente económico de ejecutar  revitalizando la obra pública, a través de un proceso virtuoso *. 

Sin embargo, para los espacios de la política que debieran defender y dar respuesta a los sectores más vulnerables, el problema del acceso a la tierra – rural y urbana-  los desborda y / o, no parece interesarle. Será porque no suma votos, “ es conflictivo “ , genera disputas de poderafecta intereses ?  : Cuales intereses, y fundamentalmente de quienes?… 

Por el contrario ….No debiera ser el momento de interrumpir este ignominioso  proceso depredatorio..? 

El proceso depredatorio se estructura en base a una secuencia que se inicia con el acaparamiento de tierras por parte de intereses transnacionales y sus aliados locales, en la ausencia de una planificación sostenida de nuestros territorios, en la falta de leyes adecuadas y/o la debilidad en su aplicación, en la desviación que ha sufrido la economía – perdiendo su valor como ciencia social – para convertirse en una herramienta de los procesos de especulación neoliberal/neocolonial que no reconoce identidades ni derechos soberanos a los Pueblos.

Estas debilidades han llevado a la pérdida del control soberano de nuestro territorio; a la extranjerización de gran parte de nuestra economía y en un exacerbado extractivismo que tiene expresiones tanto en la producción agropecuaria y en la minería, como en el desarrollo de las ciudades. 

Respecto al distorsionado proceso de ocupación de territorio urbano, se ha procurado ir identificando sus orígenes, y el resultado “lógico” de las debilidades identificadas, por el cual la viviendas de los habitantes postergados se encuentran en la periferia de las ciudades, sin equipamiento ni infraestructuras básicas, y sin acceso al uso y disfrute de la vida urbana, mientras que el centro de las ciudades son ocupados por los sectores de poder, con el pleno y exclusivo ejercicio de los servicios, infraestructuras y equipamientos que el Estado hasta ahora, ha garantizado, con los aporte de recursos de todos los ciudadanos. 

Finalmente, como expresión mas evidente de la desigualdad, resultado de las debilidades denunciadas, se debe considerar el caso de los barrios cerrados: verdaderos ghettos del privilegio, expresión del individualismo – producto de una subcultura del “salvese quien pueda” – que explica una debilidad primaria y estructural: la ausencia de un proyecto político cultural sostenido – la idea de Una Patria para Todos– que oriente a la consolidación de una sociedad que se apropie de valores trascendentales basados en la igualdad, la solidaridad, la justicia, la libertad y la soberanía. 

Hemos permitido que minorías oligárquicas decidieran por sobre las necesidades y derechos de las mayorías populares, manipulando leyes y decidiendo acciones conducentes a darle a la Tierra, sus ecosistemas y componentes orgánicos e inorgánicos el carácter de simples proveedores, valorizados solamente cuando sirven a sus exclusivos intereses, deseos y caprichos de clase. 

Es impostergable el inicio de una etapa en la cual los Pueblos retomen el control sobre el destino de la Tierra, y que las políticas que se apliquen en ejercicio de ese control conduzcan a ir consolidando crecientes niveles de uso y disfrute  en una visión del mundo basada en la Igualdad, ya que solo de esa manera se podrá alcanzar una sociedad Justa, en la cual la Ecósfera (atmósfera, geósfera, hidrósfera y biósfera) sea reconocida y honrada como la Casa Común imprescindible para las actividades humanas.

Es necesario vincular la política de suelo con el desarrollo, con el objetivo de lograr equilibrio territorial y el uso y el disfrute de la población: un territorio rural sustentable, territorios especiales (reservas naturales, humedales, cursos de agua) protegidos  y un territorio urbano con ciudades integradas, compactas, equitativas y accesibles. 

Para que estas condiciones se alcancen se debiera considerar

a.-Denunciar el proceso de extranjerización de la Tierra

b.- Incrementar los mecanismos de control social sobre los gestores públicos responsables de la aplicación de las reglamentaciones tendientes restablecer el equilibrio ambiental 

c.- Pugnar por alcanzar  una equilibrada regulación del mercado del suelo, mediante la implementación de instrumentos que garanticen que el estado – y en particular, los municipios-  aprovechen la valorización inmobiliaria que generen las normativas urbanísticas, las habilitaciones para desarrollar suelo urbano, así como las obras públicas – infraestructuras y equipamientos- para promover soluciones habitacionales en el contexto del habitat y el arraigo de la población

En la actual cultura industrial, agropecuaria e inmobiliaria, dominante – apropiadora, extractivista, depredadora, contaminante- la Tierra como Hogar no es una percepción evidente por sí misma.

Pocos nos detenemos a considerar con sentido de admiración y respeto, la matriz envolvente de la cual provenimos, y en particular  comprender que somos parte de la Tierra, y que las armonías de sus territorios – incluidos los cursos de agua, humedales, mares, e incontables organismos-  poseen ricos significados aún escasamente comprendidos,y en consecuencia, mal valorados.

Debemos convencernos de que mientras la Ecósfera no sea reconocida como el espacio común indispensable para todas las actividades humanas, las sociedades – no las personas en forma individual-  deberán reconocer / aceptar  / reglamentar y hacer cumplir, las reglamentaciones que se determinen, que aseguren la sostenibilidad de éste irremplazable recurso, con la condición básica inicial de que ésta deberá estar al servicio de las necesidades básicas de los habitantes de los territorios donde éstos se asienten. 

Resulta imprescindible e impostergable ampliar/multiplicar la accesibilidad de las familias a suelo urbano apto en cada ciudad de acuerdo a su efectiva demanda y capacidad de soporte, para optimizar las condiciones de éxito de las políticas de hábitat, al generarse suelo apto para construir viviendas de manera anticipada a las necesidades.

Para que estas condiciones se alcancen se propone

a.-Frenar el avance neoliberal en la generación de tierra urbana que compra a precio vil y revende, apropiándose de la plusvalía originada por los aportes del estado en las mejoras (infraestructuras e indicadores urbanísticos) 

b.-Impulsar legislaciones para acotar los procesos  especulativos **

  • Estableciendo el cobro de plusvalías urbanísticas a las ganancias extraordinarias de apropiadores de tierra y especuladores 
  • Determinando por ley la aplicación de porcentajes de superficie de tierra urbana apta destinada a los sectores postergados de la sociedad a emprendimientos privados destinados a los sectores de mayor privilegio. 

c.-Pugnar por una regulación específica que prohíba la fumigación adyacente a los pueblos o ciudades

  • Estableciendo rigurosas condenas al incumplimiento de las normas
  • Fomentando desarrollos agroecológicos,  reduciendo la carga impositiva y el acceso a créditos promocionales como forma de incentivar dichas actividades.

d.-Evitar el proceso de conurbación generando incentivos a emprendimientos que generen empleo en las ciudades del interior de nuestro pais.

e.-Impulsar la creación de bancos de tierras municipales con control de las organizaciones sociales, colegios profesionales, por representantes de la comunidad etc

f.-Controlar el desarrollo urbano sobre tierras inadecuadas y preservar los recursos naturales (humedales, cursos de agua, etc)

g.-Impulsar en todo el territorio nacional  leyes que establecen restricciones a los territorios sospechados de ser sometidos a  incendios provocados- contaminando el ambiente y generando graves daños ecológicos – con intención de ser objeto de procesos de especulación inmobiliaria o extractiva.

h.-Movilizar a la sociedad civil para evitarlos procesos de especulación inmobiliaria : 

  • Exigiendo que se cumplan las leyes y ordenanzas que regulan los procesos especulativos, garantizando el control sobre quienes tienen el deber de ejercer el poder de aplicación de las mismas. 
  • Garantizando la participación popular en el proceso de decisión de localizaciones y de los criterios para poner en práctica las políticas habitacionales 
  • Resistiéndose a la construcción de complejos habitacionales y otros mega emprendimientos en zonas destinadas  a espacios públicos de esparcimiento: parques, plazas, campos deportivos, playas etc 

 Enero 2024

*A mediados del 2022, la Secretaría de Integración Socio Urbana de la Provincia de Buenos Aires, a través del Fondo de Integración Socio Urbana, presentó un llamado a la compra de tierras para el desarrollo de 50 mil lotes destinados a familias de los sectores populares.

** Ley 14.449 / 2012- Ley de acceso justo al hábitat : Define los lineamientos generales de las políticas de hábitat y vivienda y regula las acciones dirigidas a resolver en forma paulatina el déficit urbano habitacional, dando prioridad a las familias bonaerenses con pobreza crítica y necesidades especiales.

**El juez de feria del Juzgado Federal Nº 4 de La Plata, Ernesto Kreplak, ordenó inscribir un proceso colectivo y decretó una medida cautelar que suspende el artículo 154 del Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 en cuanto derogó la Ley 26.737 de Tierras. 

La decisión llegó en el marco del amparo promovido por el Centro de Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata (CECIM) que cuestionaron el decreto ante los tribunales federales de la capital bonaerense. En su presentación, sostuvieron que la derogación de la ley libera el mercado de tierras, “habilitando la extranjerización de las mismas, con dinámicas latifundistas, que ponen en crisis los principios de integridad territorial y la soberanía nacional, condicionando no sólo la disponibilidad del suelo argentino, sino también los cursos de aguas dulces”. 

*Angel Hugo Merlo, Arquitecto, Integrante del IEFI, Presidente de la Cooperativa de Viviendas HABITAT; Presidente (m.c.) del Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires D1.